Monseñor Manuel José Sierra
Contenido principal del artículo
Resumen
"Sapientia aedificabitur domus, et prudentia roborabitur",
Con su sabiduría edificó una casa y con su prudencia la fortaleció (Prov. 24, 3).
EXORDIO
El sentido católico de la muchedumbre guarda silencio ante una tumba que se abre para sellar con caracteres de inmortalidad una escuela de cultura nacional. La angustiosa expectativa de la última veintena ha tenido como desenlace el abrazo de un alma superior, ungida en el óleo de la salud, con Jesucristo sacerdote. Mientras tanto, por la escala misteriosa que tiene su soporte en el corazón de Cristo y cuyos peldaños ascienden hasta el trono del Señor Omnipotente, suben como en el sueño del patriarca, el cúmulo de sacrificios, plegarias y votos, suspiros y promesas de la ciudadanía por él, guión de multitudes, amigo de los sencillos, consejero a menudo de los conductores, fuerte brazo, medula y cerebro de toda una concepción cristiana de la vida, de la historia y de la patria entre nosotros. (…)