La lucha contra el hambre

Resumen

Comienzo por advertir que no hago una frase rutinariamente humilde al decir que carezco de autoridad para hablar del tema: No soy economista ni sociólogo; ni financista ni hombre de empresa. Ni siquiera la tengo como médico, porque no soy experto en nutrición. Es verdad que el ejercicio profesional, muy alejado de esos lares, me lleva Sin embargo a vivir con frecuencia el drama de la miseria; y ni siquiera esa experiencia me confiere derecho a intervenir con acierto en esta noche. Pienso que, involucrado como me he visto en una lucha por defender a los débiles contra los fuertes (que es en esencia la filosofía de quienes estamos combatiendo el control artificial de la natalidad, dispuesto por el imperialismo norteamericano), la Universidad Pontificia Bolivariana me ha discernido el difícil honor de comentar la Encíclica "Populorum Progressio" en su aspecto de lucha contra el hambre. Para ser honrado, debí rechazar la gentil invitación. Para ser franco, confieso que me tentó la oferta, como oportunidad aprovechable de decir unas cosas que tal vez interesen a algunas personas. (…)