Bolívar y el federalismo
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Resumen
El punto de partida de la bibliografía bolivariana es sin duda alguna el Manifiesto de Cartagena, primer documento definitivo emanado del genio del Libertador. El Manifiesto fue dado estando Bolívar a punto de partir de Cartagena a Barranca, modesto puesto éste a donde por disposición del militar Labatut debía ir en campaña. Labatut pretendía, dicen los historiadores, eclipsar la naciente gloria del genio de América que ya entonces brillaba lo suficiente para suscitar sentimientos de malsana envidia. Bolívar había arribado a las costas cartageneras en noviembre de 1812. Acababa de contemplar el desastre de Venezuela cuyas internas contiendas habían dado al traste, por ahora, con las campañas libertadoras emprendidas con relativo buen suceso por las fuerzas patrióticas. La idea central del Manifiesto, en lo que a federalismo y centralismo toca, era la de una prevención a la Nueva Granada. Las experiencias de Venezuela debían servir a los del vecino país para cesar en sus luchas de ambición lugareña. La independencia del yugo español no iba a ser posible en Nueva Granada, como no lo había sido en la patria del Libertador, mientras cada comarca reclamara para sí una contraproducente autonomía cuyo solo efecto era fraccionar peligrosamente la unidad nacional y por consiguiente debílitar la fuerza emancipadora. (...)