El Panteón Nacional de Caracas

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Javier Gutiérrez Villegas

Resumen

Está bien recordar ante esta diserta asamblea que el 28 de octubre, onomástico del Libertador, se cumplen años del traslado da sus cenizas, de la Catedral de Caracas, al Panteón Nacional. Así lo dispuso el presidente Antonio Guzmán Blanco, mediante decreto que declaró la iglesia de la Santísima Trinidad, como asilo eterno para sus restos venerandos.


No es aventurado decir -apunta un historiador-, que el General Guzmán Blanco, acariciase el proyecto de erigir en Caracas un Templo Simbólico de la Patria, semejante al que la Asamblea Nacio­nal de Francia concibió en 1791 y para el cual fue destinado el santuario de Santa Genoveva, en París, tan vinculado a las tradiciones y memorias de la Revolución Francesa. De otro lado, si se considera que en España también fue convertida en Panteón Nacional una tradicional Iglesia, la de San Francisco el Grande, en Madrid, con destino a reunir los despojos del Cid, de Guzmán el Bueno, don Gonzalo de Córdoba, Nebrija, Jovellanos, Campomanes, Alonso Cano, Garcilaso, Ercilla, Tirso de Malina, amén de otros representantes eximios del espíritu hispánico, la consagración de la Santísima Trinidad de Caracas al culto de Bolívar y de los claros varones de Venezuela, queda justificada. (..)

Palabras clave:
Bolívar, Simón, 1783 - 1830 - Monumentos funerarios Panteón Nacional (Venezuela) - Comentarios Monumentos - Venezuela

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